Pvo. Salas: Dani, Carlos, Hugo, Álvaro, Javicón, Carlos Bernabé, Salguero, Fierro (Sergei m. 75), Maradona (Rodrigo m. 17), Julián y Héctor.
Bosco de Arévalo: David, Ismael, Picolo, Carlos, Javi (Héctor m. 70), Tito, Hugo, Sergio, Rubén, Seridán y Queco (Jorge m. 80).
GOLES: 1-0, m. 6: Javier (p.p.). 1-1, m. 22: Queco. 1-2, m. 87: Rubén.
ÁRBITRO: Díez Manzano (Colegio castellano-leonés). Tarjetas amarillas a Carlos Bernabé; Rubén.
CAMPO: Municipal, 500 ESPECTADORES
El Bosco Arévalo consiguió una importante victoria en el campo burgalés del Polideportivo Salas, que le permite mirar con optimismo a la zona noble de la clasificación. Los onubenses no tuvieron un partido fácil ya que el Salas, que ocupa posiciones de descenso, se implicó y salió a por la victoria desde un principio.
La primera ocasión de peligro fue del bando local. Fierro centra un balón al área y Javi en su intento de despeje se introduce el cuero en su propia meta.
Tras el gol, los serranomatiegos se fueron todavía más arriba y gracias a dos grandes acciones por ambas bandas, de Fierro y Héctor, crearon dos nuevas claras ocasiones de gol que no remató bien Julián. Poco después Queco sorprendía a Dani con una magistral vaselina y establecía el empate aprovechando la relajación local. El meta, adelantado, nada pudo hacer. A partir de ahí fue el Bosco el que se adueñó del duelo. El encuentro gira radicalmente y Seridán tuvo alguna opción para adelantar al Bosco en el marcador.
A la salida de vestuarios de nuevo ambos conjuntos demostraron no conformarse con el empate y buscar con ahínco un gol que les concediera los tres puntos. El empate no parece ser suficiente para ninguno de los dos equipos, que van a buscar intensamente la victoria. Fierro será la referencia en ataque durante la segunda mitad para el Salas y suyas van a ser las principales jugadas para que los suyos pudiesen poner por delante.
Pocos minutos después, era Fierro el que no atinaba a rematar una acción de Bernabé.
Y justo después, Héctor, en banda izquierda elabora una bella jugada y pasa a Julián que remata muy ajustado a la madera. Eran los instantes más vibrantes de la tarde. A falta de diez minutos, Rubén avisa en un precioso contragolpe que elabora Seridán, el mejor ayer por banda izquierda.
Y cuando parecía que el duelo iba a acabar en tablas volvió a resurgir la figura de Rubén. El jugador del Bosco, tras un pase magistral desde el centro del campo y se queda solo ante el portero, al que bate en un fallo defensivo garrafal en la colocación del Salas, que otorgan tres puntos importantísimos para los abulenses para ahuyentar fantasmas.
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